Fórmulas mágicas

viernes, 5 de febrero de 2016|5:43





Nada es sencillo, aunque de forma reiterada nos intenten convencer de que todo en la vida es tan simple como sumar dos más dos. Aprenda inglés en dos meses, Pierda esos kilos de más con nuestras infusiones, Sin comisiones ni gastos de cancelación (…). Creo que podríamos seguir con los ejemplos durante unas cuantas líneas más y seguramente usted, lector/a, también sería capaz de incorporar los suyos propios. La conclusión a la que quiero llegar es que, por mucho que intenten convencernos, absolutamente nada es sencillo, ni inmediato, ni obedece a una secuencia lógica que siempre, siempre se cumple.


Emprender es otro claro ejemplo en el que nos podemos encontrar con un variado abanico de propuestas simplificadas, según las cuales, la aventura de emprender puede hacerse en un par de semanas conforme a un proceso secuencial concreto, que nos permitirá construir un modelo robusto y con el que sobrevivir sin demasiados sobresaltos. Escribo lo anterior sin ánimo de hacer demagogia y tratando de caricaturizar un poco la situación, al fin y al cabo el objetivo de este post es ofrecer nuestra propia receta y recomendaciones, y preferimos que sean tomadas con la máxima prudencia.
Son reflexiones compartidas, no leyes generales.
En efecto, emprender es un camino duro, complejo y desde luego nada sencillo. Es así porque en muchos casos, quien se lanza a la tarea por primera vez, no ha recibido, por norma general, una formación al respecto y además el terreno que pisa está lo suficientemente embarrado como para resbalar a la mínima.
Transformar una Idea (feliz o no) en un proyecto empresarial, demanda un proceso sistemático de trabajo que nos permita estudiar y evaluar todas las opciones posibles. Igual que antes de construir una casa trazamos planos para plasmar lo que queremos y no perdernos en el camino, de igual forma sucede al tratar de armar un proyecto empresarial. Necesitamos un plano a escala (DIN A4 puede servir) en el que describir: ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? y ¿Por qué? En definitiva, responderemos a las incertidumbres clásicas a la hora de abordar tal proyecto.
En el próximo post expondremos los, a nuestro entender, puntos más importantes a la hora de modelar un Proyecto Empresarial a partir de la materia bruta de una Idea. De momento, y como declaración de principios, dejamos tres ingredientes que serán básicos, sea cual sea la receta que sigamos: Reflexión, Sentido Común e Información.


2 comentarios:

  1. Emprender rodeado de los mejores profesionales es una ventaja invaluable. Su experiencia, conocimiento y apoyo ayudan a superar desafíos, tomar decisiones acertadas y alcanzar el éxito empresarial de manera más sólida.

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  2. allenatiperleccellenza
    En el teatro empresarial, la disciplina es la partitura que los empresarios siguen con precisión, mientras que los emprendedores, como artistas intrépidos, improvisan notas de riesgo. Esta armonía da vida a historias de éxito.

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